La mujer que canta
Con una narración impecable mediante fragmentos -pasados y presentes- que se van hilvanando a medida que se desarrolla la historia, el canadiense Denis Villeneuve firma una película que deja al espectador totalmente implicado en todo lo que acontece.
Las vicisitudes de la madre, el viaje hacia el horror que tienen que realizar los hijos para descubrir la verdad, las guerras, conflictos de religión, incesto accidental… Todo se entremezcla para invitarnos a reflexionar acerca de la angustia y el perdón.
Una cinta dura, desgarradora -con magníficas interpretaciones-, acerca de las consecuencias del extremismo religioso y la inquebrantable voluntad de una madre en la lucha por la vida de sus hijos. Fue nominada al Oscar a la mejor película extranjera, no pudo llevárselo pero fue también digna merecedora.
De visión imprescindible.
Las vicisitudes de la madre, el viaje hacia el horror que tienen que realizar los hijos para descubrir la verdad, las guerras, conflictos de religión, incesto accidental… Todo se entremezcla para invitarnos a reflexionar acerca de la angustia y el perdón.
Una cinta dura, desgarradora -con magníficas interpretaciones-, acerca de las consecuencias del extremismo religioso y la inquebrantable voluntad de una madre en la lucha por la vida de sus hijos. Fue nominada al Oscar a la mejor película extranjera, no pudo llevárselo pero fue también digna merecedora.
De visión imprescindible.
INCENDIES. 2011. Can. Color
Dirección: Denis Villeneuve
Intérpretes: Lubna Azabal (Nawal), Mélissa Dèsormeaux-Poulin (Jeanne), Maxim Gaudette (Simon), Rémy Girard (notari Jean Lebel)
Guión: Denis Villeneuva, a partir de la obra teatral de Wajdi Mouawad
Música: Grégoire Hetzel
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